
Imagen del códice II de Nag Hammadi, que muestra el final del evangelio apócrifo de Juan y el comienzo del evangelio de Tomás.
Los libros apócrifos son todos aquellos textos o libros que no fueron aceptadosen el Tanaj judío, en la Septuaginta griega ni en el canon de las Biblias cristianas. Apócrifo viene del griego apokrýpto que significa "ocultar lejos" y se usa para designar los libros destinados al uso privado de alguna secta y para designar los libros de dudosa autenticidad o de origen incierto.
Originalmente se llamaban apócrifos aquellos libros sagrados cuyo contenido era demasiado sublime para que lo comprendiera el público en general. Pero desde la época de San Jerónimo, el término "apócrifo" adquirió un nuevo sentido y, desde entonces, se llaman apócrifos los libros que pretenden ser revelados pero que no forman parte del canon bíblico.[1]
Han ejercido y ejercen un enorme influjo en la piedad e iconografía cristianas. Entre las tradiciones conservadas únicamente en los apócrifos, se cuentan los nombres de los padres de María, Joaquín y Ana; el episodio de la Presentación de la Virgen niña en el Templo, el número y los nombres de los Reyes Magos, Melchor, Gaspar y Baltasar, y la presencia de un asno y un buey en el pesebre donde María dio a luz. Allí también se encuentran los nombres y las historias del Buen Ladrón, Dimas, y del Mal Ladrón, Gestas; la historia de Verónica recogida inclusive en la devoción piadosa del Via Crucis, de tradición católica); el nombre de Longinos, el centurión que atravesó el costado de Jesús en la cruz; o la primera sugerencia explícita de la virginidad perpetua de María, que se encuentra en el Protoevangelio de Santiago. La fuerte presencia de esas tradiciones en la liturgia lleva con frecuencia a olvidar que ninguno de ellos ha sido incluido entre los Evangelios canónicos.
En el siglo XIX comenzaron a hacerse unos estudios a fondo sobre estos textos. Se hallaron escritos apócrifos desde el año 300 a. C. hasta el Nuevo testamento, que proporcionaron a los investigadores una gran riqueza como fuentes históricas, así como posturas divergentes sobre temas como inmortalidad y resurrección, y la creencia en ellos a través de los siglos, desde un punto de vista siempre escatológico.[2]
Los apócrifos se pueden dividir en libros heréticos y piadosos. Los primeros son escritos para ser usados por sectas antiguas llamados en conjunto gnosticos y los segundos son escritos para satisfacer la curiosidad de hechos no escritos en los libros canonicos. En ocasiones, la línea entre ambos no es muy clara y la herejía contamina los libros piadosos.
Antiguo Testamento[]
Torá[]
- Apocalipsis de Lamec
- Evangelio de Eva
- Libro de los Jubileos
- Testamentos de los 12 patriarcas
Historicos[]
- Historia de Ajicar
- Libro del Justo
- Oración de Manasés
- Tercer Libro de Esdras
- Tercer Libro de los Macabeos
- Cuarto Libro de los Macabeos
Salmos[]
- Odas de Salomón
- Salmo 151
- Salmos de Salomón
Epístolas[]
- Carta de Aristea
Revelaciones[]
- Apocalipsis de Baruc
- Apocalipsis de Zacarías
- Ascensión de Isaías
- Cuarto Libro de Esdras
- Libro de Gad
- Libro de Enoc
- Oráculos sibilinos
- Testamento de Moisés
- Testamento de Salomón
Nuevo Testamento[]
Evangelios[]
Evangelios gnósticos[]
- Evangelio apócrifo de Juan
- Evangelio cátaro del pseudo-Juan
- Evangelio de Ammonio
- Evangelio de Basílides
- Evangelio de Bernabé
- Evangelio de Felipe
- Evangelio de los Ebionitas
- Evangelio de los Egipcios
- Evangelio de los Hebreos
- Evangelio de Judas
- Evangelio de María Magdalena
- Evangelio de Marción
- Evangelio de Matías
- Evangelio de la Perfección
- Evangelio de Tomás
- Evangelio de Valentín
- Libro Secreto de Santiago
- Pistis Sophia
Evangelios piadosos[]
- Ágrafas
- Documento Sadoquita
- Evangelio de Apeles
- Evangelio de los adversarios de la Ley y de los Profetas
- Evangelio apócrifo de Galilea
- Evangelio de Bartolomé
- Evangelio de Matías
- Evangelio de los Nazarenos
- Evangelio del Pseudo-Santiago
- Evangelio de Taciano
- Evangelio secreto de Marcos
- Venganza del Salvador
Evangelios de la Natividad[]
- Evangelio de la Natividad de María
- Evangelio del pseudo-Mateo
- Protoevangelio de Santiago
Evangelios de la Infancia[]
- Evangelio Árabe de la Infancia
- Evangelio Armenio de la Infancia
- Evangelios de la Infancia de Tomás
- Historia de José el Carpintero
Evangelios de Pasión y Resurrección[]
- Evangelio de Bartolomé
- Evangelio de Nicodemo
- Evangelio de Pedro
Evangelios de la Asunción[]
- Libro de San Juan Evangelista
- Narración del Pseudo José de Arimatea
- Tránsito de María
Historicos[]
- Hechos de Pedro y los Doce Apóstoles
- La Hija de Pedro
Epístolas[]
- Carta de los Apóstoles
- Carta del Domingo
- Correspondencia entre Séneca y Pablo
- Correspondencia entre Jesús y Abgaro
- Correspondencia entre Tiberio y Pilato
- Correspondencia entre Pilato y Herodes
- Epístola de Bernabé
- Epístola a los Laodicenses
- Tercera Epístola a los Corintios
Revelaciones[]
- Apocalipsis de Bartolomé
- Apocalipsis de Daniel
- Apocalipsis de Esdras
- Apocalipsis de Esteban
- Apocalipsis de Juan
- Apocalipsis Gnostico de Pedro
- Apocalipsis de Tomás
- Apocalipsis de Pablo
- Apocalipsis de Pedro
- Apocalipsis de Santísima Virgen María
- Ascensión de Santiago
- Pastor de Hermas
Referencias[]
- ↑ www.corazones.org. «Los libros apócrifos». Catholic.net. Consultado el 24 de diciembre de 2018.
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